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[Varry brava] Que no pare la juerga

25 abril

O The party never ends espetado a lo anglo. Veraniego, soleado, pura frescura y apologético de la nocturnidad en su cara más fiestera. La pera limonera de la inmediatez y la transparencia cancionera.

“Nos gusta la obscenidad y el sentido del espectáculo. La música es parte de esa imagen excesiva, divertida y bailonga que es esencia absoluta de este proyecto”. Varry brava retorna al núcleo duro con Óscar, Aarón y Vicente de nuevo enchufados para gozarlo y hacérnoslo gozar con quizá la mejor conexión interplanetaria jamás descubierta: la música.

Con el mismo tronco común de darle a saco al ritmo de la electrónica y los teclados enlazados con un pop redondo encontramos más de una sorpresa, deleitaros sino con las ráfagas pro Chimo Bayo de Fantasmas, uno de los temas fuertes del disco, pura fluorescencia. Títulos certeros que no pueden ir más al grano. Decálogo glamfestivalero, todo un homenaje a las ganas de pasárselo bien y a la necesaria cara amable de la vida, sencillamente. Un gazpacho sónico de estética eficacia más que resultón, producto gourmet de la huerta con unos sintes de ejecución exquisita.

La secuela del mítico y suprabailongo Demasié parte de una línea continuista enriquecida por llevar aún más allá el inconfundible y trabajado sonido del tridente murciano experimentando y profundizándose en nuevas texturas. Ojito al himno varrybravense que se marcan con Playa, temazo expansivo ideal sobresaliente para desatar la pasión y la diversión. Casi cegador de lo glorioso que va creciendo se despliega poderoso como lo que es, un hitazo ultrarefrescante para gozarlo en bucle por ejemplo en un festival al atardecer dándolo todo. Plurifuncional, “vitalista, podría formar parte de esa recopilación de hits que igualmente sirve para bailar hasta el amanecer que para quemar calorías en el gimnasio” (Rojas Arquelladas). Estos simpatiquísimos chavales nos vuelven a regalar un catálogo de buenrollismo y bailoteo. El trío muchachil de los Varry se lo vuelven a pasar en grande con un trabajo ideal para romper tarima (que diría cierto artista fugaz latino) divertidísimo, juguetón y muy colorista.